Por Claudia Novo Castellví, Lady Play at ByBa

Tu bebé aprende creando — literalmente

Durante los primeros años, tu bebé no está simplemente recibiendo estímulos: está construyendo una teoría del mundo pieza por pieza.

Cada objeto que toca, muerde o sacude es parte de un experimento creativo.
Cada acción repetida —tirar al suelo, presionar, agitar, golpear— es una hipótesis que pone a prueba.

No está “jugando sin sentido”.
Está explorando, comparando, imaginando posibilidades… y creando conexiones neuronales nuevas.

En esta etapa (0 a 2 años), su pensamiento está profundamente unido al cuerpo y los sentidos.
Aprende con las manos, con la boca, con el movimiento.
Todo es investigación creativa.

La creatividad es su sistema operativo del aprendizaje

Para un bebé, creatividad no es hacer dibujos ni inventar historias:
Es la capacidad de descubrir cómo funciona el universo.

Cada vez que repite una acción, está haciendo ciencia en su nivel más puro:
“Si hago esto… ¿pasa lo mismo otra vez?”
“¿Y si lo hago más fuerte?”
“¿Y si lo hago con otro objeto?”

No busca resultados estéticos:
Busca patrones, relaciones, efectos, posibilidades.

Eso es creatividad en su forma más primitiva y poderosa:
una curiosidad que modela el cerebro.

Actividades para apoyar esta etapa creativa del aprendizaje

1. Bandeja de exploración sensorial

Ofrece objetos seguros con texturas, tamaños y sonidos diferentes:
Una esponja, una cuchara de madera, una pelota suave, una tapa metálica.

Tu bebé los explorará libremente:
apretará, sacudirá, comparará.
Tú solo necesitas estar presente y disponible.

2. Juego de causa-efecto

Dale materiales que reaccionen a su acción:
un sonajero, bloques que caen, cubos que puede meter y sacar.

La repetición no es aburrimiento:
es investigación creativa.

3. Exploración con agua

Un recipiente, agua, cucharas, esponjas.
Tu bebé descubrirá:
“Si aprieto, sale agua.”
“Si golpeo, salpica.”
“Si lo vierto, se mueve.”

Es una pequeña clase de física intuitiva, vivida creativamente.

Esencial para la Familia Creativa

Tu bebé no aprende copiando:
aprende creando.
Cada gesto, cada repetición y cada descubrimiento construyen su forma de pensar.
Acompañarlo con presencia y calma es darle permiso para explorar, equivocarse, comparar y entender el mundo a través de su creatividad natural.